martes, 27 de marzo de 2012

Los europeos somos más africanos de lo que se pensaba

Un estudio internacional coordinado por la Universidad de Santiago revela una mezcla genética prolongada en las poblaciones de ambos continentes durante los últimos 11.000 años

Todos somos africanos. Sobre nuestro origen biológico no hay dudas: todos los europeos, al igual que el resto de las poblaciones humanas, derivamos de los Homo sapiens que salieron de África hace entre 60.000 y 70.000 años. Pero desde entonces, con la frontera marcada por una distancia de miles de años, el genoma europeo se fue diferenciando y apenas se volvió a emparentar con el subsahariano más que en episodios puntuales de mezcla genética protagonizados por las migraciones de africanos a Europa durante el imperio romano, por las conquistas árabes o, más recientemente, por el tráfico de esclavos. Son sucesos históricos producto de adaptaciones que dejan su huella en el genoma y que los investigadores pueden leer a través del ADN mitocondrial, el que las madres transmiten a su descendencia. Esta es la historia conocida hasta ahora, pero un trabajo internacional coordinado por el Instituto de Medicina Legal de la Universidade de Santiago, que ocupará la portada de la revista «Genome Research», la más importante del mundo en su área, reescribe las migraciones poblacionales y ofrece una nueva visión. ¿La conclusión? Los europeos modernos somos más africanos de lo que hasta ahora se pensaba. O al menos su huella está más impresa en nuestro genoma de lo previsto.

Después del análisis de miles de muestras biológicas, los investigadores han determinado que los vínculos genéticos entre Europa y África se han mantenido de forma constante a lo largo de los últimos 11.000 años. «Es posible que en nuestros genes tengamos muchos otros segmentos de ADN que se remontan a episodios de intercambio genético entre estos dos continentes y que datan de esta época prehistórica», explica Antonio Salas Ellacuriaga, profesor de la Facultad de Medicina y coordinador del estudio. La nueva componente subsahariana está presente en más del 35% de los linajes que las poblaciones africanas han dejado en nuestro genoma. Esta huella se encuentra especialmente presente en los países mediterráneos, pero tampoco es ajena a poblaciones atlánticas como la gallega. De hecho, si a una población gallega se le practicara un análisis genético es probable que entre un 3% y un 4% presente un ADN mitocondrial de origen africano fruto de este mestizaje histórico. El componente africano en los gallegos sería aún más alto, entre un 6% y un 7%, pero este aporte extra habría llegado en épocas más recientes.
... La Voz de Galicia

Link 2: Genetic study unravels ancient links between African and European populations: (Cold Spring Harbor Laboratory) Large numbers of people moved between Africa and Europe during recent and well-documented time periods such as the Roman Empire, the Arab conquest, and the slave trade, and genetic evidence of these migrations lives on in Europeans today. But were there more ancient migrations? In a study published online today in Genome Research, researchers present the first genetic evidence for prehistoric gene flow between Africa and Europe, dating back as far as 11,000 years ago.

1 comentario:

Maju dijo...

El estudio no dice que seamos "más africanos", ya que el porcentaje de linajes L(xM,N) es el mismo (<1%), lo que dice es que un 35% de estos linajes son, de acuerdo con sus estimaciones, pre-Neolíticos.

Esto puede apoyar las nociones intercambio genético con África del Norte (que tiene como 30% de linajes de origen Europeo sudoccidental o ibérico) en la génesis del Oraniense/Iberomauritano.