Dombate ya ha recuperado su apariencia original

El corredor de acceso a la cámara vuelve a estar cubierto y solo quedan detalles para la conclusión de la obra

El dolmen de Dombate prácticamente ha recuperado el aspecto que tenía cuando se utilizaba como cámara mortuoria. casal

El corredor del dolmen de Dombate ha recuperado la apariencia que tenía cuando el monumento era utilizado como lugar de enterramiento, hace más de cinco mil años. La empresa Arkaios concluyó la reposición de las dos losas que tapaban el pasillo de entrada y que ya aparecieron desplazadas cuando se iniciaron las excavaciones, en 1987. Desde entonces, el acceso, que está lleno de pinturas y grabados, ha permanecido al aire libre. Antes de volver a colocar las rocas fue necesario realizar un estudio para conocer si las losas verticales volverían a resistir el peso.

Sin embargo, el principal inconveniente con el que se encontraron los arqueólogos fue la imposibilidad de colocar una grúa en el pabellón que protege el dolmen. Fue preciso utilizar un sistema de carriles muy rudimentario y seguramente simular al que se usó para la construcción del megalito.

Tras la colocación de las losas del corredor se realizó una pequeña excavación en el área que habían estado ocupando durante años. Además, los técnicos cubrieron con grava las dos pequeñas superficies, como ocurrió en las otras zonas en las que que había desaparecido la coraza original. Cristina Viu / La Voz de Galicia

Los problemas de humedad podrían retrasar la conclusión de la rehabilitación

A pesar de que el jueves terminará la restauración del dolmen, todavía quedará un aspecto pendiente, que es el estudio del clima que hay en el interior del pabellón y que debe garantizar el mantenimiento de las pinturas rupestres. Todavía está pendiente un informe sobre la temperatura y la humedad que hay en el edificio y la forma en que afecta a la decoración interior del megalito, pero en algunas zonas pueden verse pozas de agua, lo que indica que el sistema ideado por el arquitecto Francisco Vidal presenta algunos problemas.

Una de las áreas que se ha inundado en algunas ocasiones es la parte trasera de la cámara, donde no se reconstruyó el túmulo para poder mostrar la magnitud de la losa y los surcos que los constructores de Dombate dejaron y que posiblemente servían para que la cámara no se anegara. Al parecer, la situación de esta área tiene solución, por lo que se le aplicará el acabado que estaba previsto en el plan original.

Testigos

Otra cosa es lo que ocurre en otro de los llamados testigos de la excavación, a la izquierda de la puerta de acceso al dolmen. Allí se ha comprobado que se producen inundaciones bastante frecuentes, pero el sistema que se utilizará para evitarlas aún está pendiente. Al parecer, en este tramo no se efectuará ninguna actuación hasta que no se encuentre el modo de evitar la acumulación de agua.

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