Una estatuilla de arcilla del Neolítico, de hace unos 7500 años, que representa a una posible 'sacerdotisa danzante', ha sido descubierta por unos arqueólogos que excavaban en un asentamiento ubicado cerca de la ciudad de Varbitsa, en el distrito de Shumen, en el noreste de Bulgaria.

La estatuilla femenina es especialmente interesante porque presenta unas características muy detalladas. Se puede observar perfectamente que tiene las manos colocadas en su cintura y que su rostro muestra unos ojos, una boca y unas fosas nasales muy abiertas, revelando una gran expresividad. Se trata de uno de los mejores elementos figurativos del Neolítico búlgaro encontrados hasta la fecha.

La estatuilla de la 'sacerdotisa danzante' ha pasado a formar parte de la colección permanente del Museo Regional de Historia de Shumen, en Bulgaria, junto con varios artefactos más que se han hallado en los 20 días de excavaciones arqueológicas del asentamiento cercano a Varbitsa. Este fructífero yacimiento tiene una superficie total de 1,3 hectáreas, aproximadamente, y cuenta con una estratigrafía arqueológica que abarca varios períodos de tiempo.

Svetlana Venelinova, director adjunto del equipo que ha llevado a cabo esta excavación, indica que los materiales arqueológicos que han encontrado superan sus expectativas y que, asimismo, han llegado a detectar en la estratigrafía hasta dos etapas culturales diferentes, una más antigua del Neolítico y otra más reciente de tiempos romanos.

La intrigante estatuilla femenina, a pesar de que no es fácil descifrar una obra de arte de hace tanto tiempo, se ha interpretado a priori como una sacerdotisa que danza. Asimismo, se ha descrito como la representación de una mujer joven cuyos rasgos faciales muestran una gran exaltación religiosa durante la celebración de un posible ritual dedicado a la Diosa Madre y al culto a la fertilidad. Las detalladas características de la estatuilla llevan a los arqueólogos a pensar que la mujer en cuestión era la propia sacerdotisa del asentamiento que están excavando.

Otro interesante hallazgo encontrado en el mismo yacimiento cercano a Varbitsa es un fragmento de una vasija de cerámica para el grano con un relieve de una mujer joven en actitud orante. Se trata, hasta ahora, de la primera representación conocida de este tipo y parece estar relacionada con el culto a la recolección y a la preservación de los cultivos.

El asentamiento en cuestión pervivió durante unos 300 años en época neolítica. Su excavación ha sido financiada por el Museo Regional de Historia de Shumen y por algunos patrocinadores locales.